L'Oréal pone al día su centro técnico Academia en Santiago de Chile

Hace unos días, el centro técnico Academia L'Oréal, situado en Santiago de Chile, se reinauguraba bajo el auspicio de la división de productos profesionales, clientes y técnicos de la filial chilena junto con el Comité de Dirección General de la multinacional francesa. El espacio se propone formar a los profesionales mediante un nuevo concepto de peluquería que integre tecnología y diseño de última generación. En definitiva, se pretende transmitir los conocimientos técnico académicos más avanzados y sostenibles, pensando en peluqueros y estilistas que quieran estar al día de su profesión.

A lo largo de los últimos cuatro años, la Academia L'Oréal ha preparado a más de 15.760 profesionales y asesorado a cerca de 5.000 salones acerca de cómo sacar el máximo partido técnico a sus marcas L'Oréal Professionnel, Kerastase, Redken y Matrix.

El concepto Salon Emotion, también en Chile

Este proyecto, de alcance global, facilita el progreso de la industria de la peluquería, mediante propuestas de diseño, espacios más funcionales y mobiliario estandarizado, acorde a los siete momentos de emoción que experimenta una consumidora en el salón. En definitiva, herramientas que generan negocio y convierten el salón en un establecimiento lleno de carga emocional que provee experiencias únicas, prácticamente “a medida”.

Además de las novedades ya comentadas, L'Oréal ha creado Salon Secret, especie de escaparate digital que aúna la experiencia y consejos técnicos en un hair blog dirigido por profesionales y que, actualmente, cuenta con más de 330 mil visitas.

Negocio más eco que nunca

El grupo L'Oréal tiene el compromiso de incorporar un enfoque sostenible, basado en el impacto que se deriva de su actividad en toda la cadena de valor. Es decir, desde la investigación y desarrollo de sus productos, al tratamiento de las materias primas, la relación con proveedores y, finalmente, a los productos terminados. Algunas medidas eco responsables son: iluminación natural en la medida de lo posible, controles de luz y sensores de presencia, ahorro de agua mediante válvulas temporizadas y estanques de doble descarga, tratamiento y separación de residuos, mobiliario de oficina producido con materiales reciclados y reducción de papel, por ejemplo.