Según la consultora Satius Consulting Group, un 40% de los argentinos realizan primeras consultas sobre una dolencia a especialistas alternativos. Así sube el uso de terapias alternativas en el país, como la acupuntura, la homeopatía y la naturopatía.

Un estudio de la Asociación Argentina de Trastornos de Ansiedad (AATA) concluyó que el 16% de los argentinos padece ansiedad y 8 de cada 10 afirman padecer o haber padecido estrés laboral. Y muchos de ellos dicen poner remedio en base a este tipo de terapias que poco tienen que ver con las convencionales.

Algunas fuentes determinan que la Organización Mundial de la Salud apoya la promoción, estudio y utilización de todos los recursos que puedan aportar una mejora de la salud, incluyendo la Medicina Tradicional China, ayurveda, homeopatía, fitoterapia, etc.

La medicina tradicional está teniendo importantes avances en el mundo, y, pese a ello, algunos pacientes argentinos prefieren tratar sus enfermedades con otras terapias. Esto hace que muchos médicos critiquen esta decisión, especialmente que los pacientes argentinos recurran directamente a este tipo de terapias, sin antes consultar con un profesional en medicina.

Los profesionales establecen que las terapias alternativas son útiles como complemento a la medicina tradicional, pero no como única terapia a seguir

Critican que no existen aún evidencias científicas sobre el resultado de estos tratamientos. Por ese motivo, es recomendable realizarlo de forma complementaria a un tratamiento tradicional. Y establecen que primero es mejor consultar con un profesional de la medicina convencional.

El país tampoco reconoce este tipo de tratamientos como medicina oficial. Según la Asociación Española Contra el Cáncer este tipo de terapias alternativas hacen referencia a las que se utilizan en lugar de la medicina convencional. Un ejemplo es el uso de un suplemento dietético como tratamiento del cáncer en lugar de la quimioterapia recomendada por el oncólogo.

Pero también los profesionales establecen que son útiles como complemento a la medicina tradicional, pero no como única terapia a seguir.









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